El abogado penalista Francisco Bernate, representante de la familia de Jaime Esteban Moreno, habló en entrevista con La FM sobre los avances del caso por el asesinato del joven estudiante de la Universidad de Los Andes, ocurrido durante la noche de Halloween en Bogotá.
Bernate explicó que el proceso judicial se encuentra en un punto determinante, pues el juez definirá si el presunto agresor será enviado a prisión preventiva.
“Vamos a ver los argumentos de la defensa para oponerse a la solicitud que hizo la Fiscalía. El caso es muy fuerte y los argumentos fueron sólidos”, señaló el abogado, quien indicó que el acusado podría permanecer privado de la libertad mientras avanza la investigación.
Tres hitos inmediatos en la investigación
El abogado detalló que el proceso judicial contempla tres pasos relevantes en los próximos días. En primer lugar, la decisión sobre la medida de aseguramiento del Juan Carlos Suárez, principal sospechoso, luego la captura y judicializaciónRicardo González, la otra persona presuntamente implicada en la agresión que sigue prófugo, y la vinculación formal de una de las mujeres presentes en el lugar de los hechos, quien, según Bernate, habría incitado directamente la golpiza. “Ella estaba incitando la agresión a la víctima”, precisó el representante legal de la familia.
Lo que ocurrió antes de la golpiza
Según explicó Bernate, antes del ataque se habría presentado un breve altercado entre Jaime Esteban Moreno y una de las mujeres que acompañaban a los agresores. “No se sabe exactamente qué ocurrió, si fue un comentario o un intento de beso”, detalló.
El abogado aclaró que entre ese momento y la agresión transcurrieron cerca de tres horas, por lo que descartó que se tratara de una reacción impulsiva: “Esto fue un acto premeditado e intencional”.
Dudas sobre los videos y el papel de las autoridades
Bernate también se refirió a los videos de seguridad difundidos por algunos medios de comunicación. Afirmó tener dudas sobre la validez horaria de las grabaciones, dado que los presuntos agresores fueron detenidos poco después del ataque. “Los detuvieron a unas cuadras del lugar hacia las cuatro de la mañana”, explicó.
Asimismo, pidió a las autoridades verificar si el establecimiento donde ocurrió el incidente contaba con los permisos necesarios y respetaba los límites de aforo. “Corresponde a la Alcaldía determinar si había irregularidades”, agregó.
Cambio de fiscal y hallazgos forenses
Sobre el reciente cambio de fiscal en el proceso, Bernate consideró que fue una medida positiva. “La nueva fiscal actuó con rapidez y fortaleció el caso”, aseguró, enfatizando que la decisión no afectará la solidez de la investigación.
En cuanto a los análisis del Instituto Nacional de Medicina Legal, el abogado reveló que no se encontraron rastros de sustancias estupefacientes en las pruebas practicadas.
“Solo una de las personas presentaba presencia importante de alcohol”, explicó, agregando que se busca determinar si hubo consumo o venta de drogas en el establecimiento y quién era la quinta persona que acompañaba al grupo esa noche.
Retrasos en la atención policial y fallas en cámaras oficiales
Bernate también cuestionó la demora en la reacción de la Policía, asegurando que la agresión ocurrió hacia las 3:20 a. m. y los uniformados llegaron casi cuarenta minutos después.
El abogado criticó además la falta de funcionamiento de las cámaras de seguridad oficiales: “Las únicas que sirvieron fueron las de los negocios privados”.
De acuerdo con su relato, las imágenes que permitieron identificar a uno de los implicados provienen de una miscelánea cercana al lugar de los hechos, lo que fue clave para el avance de la investigación.












