Bogotá enfrenta una nueva alerta en materia de salud pública, pues en lo que va del año 2025 se registraron más de 11.300 casos de consumo de sustancias psicoactivas, según datos del sistema de vigilancia epidemiológica VESPA.
Esta cifra genera preocupación, pues de acuerdo con este sistema de información, es el ‘Tusi’ o ‘cocaína rosada’ el que más ha tenido crecimiento en el consumo, pues aumentó en un 50% entre el 2023 y 2024.
Según el informe, las localidades más afectadas por concentrar el mayor número de casos son Kennedy, Bosa, Engativá, Puente Aranda y Suba.
Para los especialistas en salud pública, el incremento en su consumo implica gravedad, pero se acentúa debido a que se ha normalizado en diferentes espacios como parques, zonas públicas o incluso entornos escolares.
De acuerdo con las autoridades, estos lugares se han convertido en zonas de venta, facilitando su adquisición.
“Hoy los parques y el espacio público tengan que ser la oficina del jíbaro, y sobre todo, donde el mundo consume y no pasa nada, absolutamente nada… hay que regularlo”, aseveró Diana Diago, en entrevista a Noticias RCN.
¿Por qué el ‘Tusi’ es una droga altamente peligrosa?
El ‘Tusi’, según los expertos, es una sustancia sin composición química fija debido a que es elaborada a partir de otras que pueden incluir cafeína, ketamina, éxtasis, benzodiacepinas, opioides e incluso ibuprofeno.
“Esto no tiene composición fija, y eso hace que sus efectos sean mucho más grandes y mayores”, argumentó Catalina Chávez, psicóloga clínica experta en adicciones.
Debido a que esta droga está compuesta por una mezcla de varias sustancias químicas, su efecto y duración pueden variar, lo que, según conocedores, deriva su peligrosidad. Y reiteran que si se revuelven con otras drogas, puede aumentar el riesgo en la salud por alteración en la conducta y afectación en la salud mental. Además, recalcan los expertos que su consumo prolongado puede ocasionar la muerte.












