Contra todo pronóstico, el precandidato Gustavo Bolívar fue el primero en retirar su candidatura por el Pacto Histórico. En un video publicado en su cuenta de X, aseguró que no se presentará en la consulta del 28 de octubre por “ética y coherencia”, debido, según comentó, a que se había comprometido a ayudar a quien saliera vencedor de la consulta.
También señaló que no deseaba estar al lado del exalcalde de Medellín Daniel Quintero y recalcó que esa candidatura no era ética y estaba llena de dudas.
“He decidido no inscribirme, porque tengo que suscribir un convenio según el cual tengo que apoyar a quien gane en caso de que yo no sea el ganador. Y hay una pequeña posibilidad de que el candidato Daniel Quintero gane y yo me vea obligado a trabajar en una candidatura que no creo, una candidatura con muchas incoherencias”, sentenció Bolívar.
Más adelante anunció que “iba a apoyar a Cepeda”. Otra candidata que siguió el camino de la renuncia fue María José Pizarro, quien en un video afirmó que daba un paso al costado y declinaba su postulación a la presidencia. Manifestó su interés de impulsar a Iván Cepeda.
Pizarro acusó al Consejo Nacional Electoral de hacer “sabotajes a la democracia” y de no brindar garantías al partido Progresistas y al Pacto Histórico.
La última candidata en cancelar su intención y que es afín al gobierno de Gustavo Petro es Susana Muhammad, quien comentó en sus redes sociales su total apoyo al candidato Iván Cepeda, afirmando que esa campaña tiene “lucha social, el cambio ético, la fuerza de la convicción en el pueblo y los derechos”.
Además, Muhammad destacó que Cepeda será un buen presidente, pues resaltó su compromiso por las causas sociales.