La desaparición y posterior hallazgo sin vida de Valeria Afanador, niña de 10 años, mantiene en duelo a Colombia. El martes 12 de agosto fue el último día en que se tuvo registro de ella, cuando durante el recreo en la institución salió hacia una zona con arbustos ubicada en los alrededores del colegio Gimnasio Campestre Los Laureles, en Cajicá.
Las cámaras de seguridad mostraron el momento en que la menor se alejó de la institución, hecho que desencadenó una intensa búsqueda de 18 días. No fue hasta el 29 de agosto cuando, en medio de los operativos exhaustivos de búsqueda, su cuerpo sin vida fue encontrado en el Rio Frio, a escasos metros del colegio. Su muerte aún está bajo investigación de las autoridades, mientras la comunidad y la familia piden respuestas claras.
Familia denuncia fallas de seguridad en el colegio
Julián Quintana, abogado de la familia Afanador, publicó un video en redes sociales en el que muestra el lugar por donde Valeria habría salido del colegio. En su denuncia, el litigante aseguró que el plantel no cumplió con las medidas de protección necesarias y, además, que el sitio fue modificado tras la desaparición.
“Se reconoció que la reja era insegura y que posteriormente se alteró la escena. Es un grave hecho que exige verdad y justicia”, afirmó Quintana, señalando a la institución de encubrir posibles fallas en su responsabilidad de cuidado.
El colegio no solo omitió cuidar a Valeria pese a sus fallas de seguridad, lo que terminó en su homicidio, después modificó la salida por donde sacaron a la niña:
1. Reconocen que la reja era insegura.
2. Alteraron la escena del delito.
Grave hecho que exige verdad y justicia pic.twitter.com/j9qWLNkQyb— Julián Quintana (@julianquintanat) September 3, 2025
Gobernación de Cundinamarca evalúa sanciones
La Gobernación de Cundinamarca confirmó que ya se realizaron visitas de inspección en el colegio. Las autoridades educativas no descartan la posibilidad de ordenar su cierre si se demuestra que existieron falencias en los protocolos de seguridad y supervisión del alumnado.
El caso ha generado preocupación entre padres de familia y la comunidad de Cajicá, quienes exigen mayor claridad sobre el papel del colegio en los momentos previos a la desaparición de la menor.
Colegio Los Laureles rechaza acusaciones de alterar la escena
Por medio de su representante legal, el abogado Francisco Bernate, el colegio negó haber manipulado el área donde fue vista Valeria por última vez. “Eso es falso. La institución activó de manera inmediata los protocolos que exigen las normas, atendió a las autoridades y cumplió con las instrucciones que ellas dieron, incluyendo la instalación de una reja en uno de los costados y algunas reparaciones locativas”, explicó Bernate en entrevista con La FM.
El abogado agregó que corresponde a la Fiscalía escuchar en declaración a los profesores que estaban a cargo de los estudiantes, incluidos los de Valeria, para esclarecer la situación. “El rector no es quien debe estar en el patio vigilando a los niños directamente, sino que existen docentes encargados de esa labor”, recalcó.
Investigación de la Fiscalía será determinante
La Fiscalía avanza en la recopilación de testimonios y pruebas para determinar qué ocurrió el día de la desaparición y establecer si hubo negligencia por parte del colegio. Tanto la familia como la comunidad esperan que las investigaciones aclaren las circunstancias que rodearon la muerte de Valeria Afanador y que se haga justicia frente a un caso que ha estremecido a todo el país.