El reciente nombramiento de Víctor De Currea Lugo como asesor del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República ha desatado una fuerte polémica dentro y fuera del ámbito político. El académico y periodista ha sido objeto de denuncias de presunto acoso sexual que generaron en su momento una fuerte resistencia a su designación como embajador de Colombia en los Emiratos Árabes Unidos.
Esta nueva vinculación al Gobierno del presidente Gustavo Petro ha sido blanco de críticas, especialmente por tratarse de un cargo de confianza dentro del Ejecutivo.
Defensoría del Pueblo critica mensaje del Gobierno
La defensora del Pueblo, Iris Marín, fue una de las primeras en pronunciarse al respecto. En declaraciones públicas, señaló que este tipo de decisiones comprometen la coherencia del Gobierno frente a sus compromisos con la igualdad de género y la lucha contra la violencia hacia las mujeres.
El nombramiento de Víctor Currea Lugo como asesor presidencial, pese a las denuncias públicas de acoso sexual en su contra, algunas de estudiantes menores de edad en su momento, es un nuevo desconocimiento del poder simbólico que tienen las decisiones del presidente de la…
— Iris Marín Ortiz (@MarnIris) June 7, 2025
“¿Cuál es el mensaje que quiere mandar el presidente a la sociedad cuando insiste en ubicar a hombres con denuncias creíbles de violencia de género en cargos de confianza suyos?”, cuestionó Marín. Además, pidió que se adopten acciones contundentes y ejemplares en defensa de los derechos de las mujeres y contra la impunidad en casos de violencia sexual.
Denuncias previas ya frustraron su nombramiento como embajador
Víctor De Currea Lugo había sido postulado como embajador ante los Emiratos Árabes Unidos, pero dicha designación fue retirada por el Gobierno luego del rechazo social, político y mediático ante los señalamientos en su contra.
Entre quienes han rechazado su presencia en cargos del Estado, se encuentra la congresista Jennifer Pedraza, quien recordó que De Currea fue objeto de múltiples denuncias por conductas inapropiadas hacia estudiantes, especialmente en la Universidad Nacional. A pesar de no existir condenas judiciales en su contra, diversos sectores han considerado que las denuncias son lo suficientemente graves como para inhabilitarlo de ocupar cargos de alto nivel.
Debate ético sobre los nombramientos en el Gobierno Petro
Este caso revive el debate sobre la necesidad de criterios éticos estrictos en la selección de altos funcionarios públicos, particularmente en un Gobierno que ha prometido liderar desde la inclusión, la transparencia y el respeto por los derechos humanos. El nombramiento de De Currea Lugo, a pesar de su trayectoria académica, plantea cuestionamientos sobre la coherencia del Ejecutivo en la lucha contra la violencia de género y la credibilidad institucional frente a la ciudadanía.