Sergio Fajardo, que está a punto de lanzarse al agua como candidato presidencial, asegura que ya lleva un buen recorrido visitando las regiones, pero en sus correrías ve a una Colombia diferente, llena de amargura y frustración. Fajardo afirma que está preparado para cambiarle la cara a nuestro país.
“En el recorrido veo un país con rabia, resentimiento, amargura, frustración y tristeza. Una palabra que veo mucho es incertidumbre. Colombia no es así. Esa Colombia necesita un gobierno que la pueda sanar. Yo quiero encabezar ese gobierno. Para eso hemos construido esta carrera política durante tantos años”, sostuvo en entrevista con Noticias RCN.
Dice que, para ello, busca convocar a la izquierda, al centro y a la derecha con el propósito de hacer realidad esos cambios en términos políticos.
Sergio Fajardo reconoce estar contento en este nuevo empeño político, una carrera en donde ha participado en dos ocasiones: en el 2018 y en el 2022. Para el exgobernador de Antioquia, la última campaña fue muy dura, por eso sostiene que hay lecciones aprendidas, entre ellas el descubrimiento del mundo digital y el aprecio por las redes sociales. Asevera que acoger a las redes sociales le permitió aprender otro lenguaje.
“Algo que me ha servido mucho es haber entrado al mundo digital. Yo no apreciaba las redes sociales. Pensaba que eso no iba conmigo porque soy profesor, matemático. Nosotros explicamos, demostramos, y eso toma tiempo. Pero dejé los prejuicios y decidí aprender otro lenguaje, otra cultura. Desde febrero del año pasado hasta hoy, entré a ese mundo”, recalcó en RCN.
Frente a estas lecciones que le ha enseñado la vida y la docencia, sostuvo que está dispuesto al aprendizaje y a dar el primer paso para transformar la política. Para este candidato existen otras formas de hacer política y es respetar las reglas, ser decentes y no hacer trampa.
“Siempre lo he dicho: prefiero perder a ganar haciendo trampa. En mi vida no ha habido, no hay ni habrá un Armando Benedetti. Y eso lo dijeron los mismos del pacto”, recalcó en Noticias RCN.
Y es que para Fajardo los principios no son negociables, y aunque asegura que el 2026 será uno de los años más difíciles para gobernar, dice estar listo para el reto e insiste en que la manera de administrar lo público y de construir país es a partir del respeto.