Un hecho de violencia ocurrido en el departamento del Valle del Cauca, está afectando a un grupo de menores, pues el bus en el que se desplazaban fue incinerado. Según lo denunciado por la empresa Asocaña, dos individuos interceptaron el bus que, en el momento del ataque, estaba en la vía entre Villapaz y Jamundí trasladando a un grupo de niños y jóvenes a una escuela de fútbol de un ingenio azucarero.
Según las autoridades, los delincuentes esperaron a que el vehículo finalizara el trayecto para, posteriormente, atacar al conductor y al bus de la escuela de fútbol. Por ello, el conductor fue obligado con violencia a salir y luego, los delincuentes le prendieron fuego al automotor hasta que quedó incinerado.
El conductor resultó herido en el ataque, por lo que fue remitido de urgencia a un centro médico cercano, en donde recibió atención especializada.
Frente a este acto delictivo, Asocaña se pronunció y rechazó de manera contundente el acto delincuencial que afecta a la juventud del Valle del Cauca y destruye los sueños y el futuro de los menores y de sus familias.
“Asocaña rechaza y denuncia el violento ataque perpetrado en la noche del miércoles contra un bus que finalizaba la ruta de transporte de niños y jóvenes de una escuela de fútbol de un ingenio azucarero,” aseguró Claudia Calero, presidenta de Asocaña.
La presidenta del complejo azucarero lamentó este hecho y recalcó que estas acciones afectan a los niños que buscan nuevas oportunidades y que, por causa de la delincuencia, no se podrán concretar.
“Es inaceptable que la violencia arremeta contra iniciativas que transforman la vida de más de mil niños a través del deporte. Estas acciones van en contra del bienestar de los menores y de sus sueños”, reiteró Calero.
Y anunció que por estos hechos delictivos no se podrá prestar este servicio lo que dificultará la continuidad en el programa de formación deportiva. Por lo que hace un llamado a las autoridades a que estén presentes y brinden seguridad a los menores y a la población.
“Debido a que no hay garantías de seguridad en esta zona, nos vemos obligados a reevaluar la continuidad del transporte que se les brinda para sus entrenamientos. Hoy los violentos vuelven a robarnos la esperanza. El sur del Valle y el norte del Cauca claman por justicia, seguridad y presencia real del Estado”, aseguró Calero.
Y es esa la justicia que piden las familias y los jóvenes afectados que hacen parte de las 10 escuelas de futbol ubicadas en Miranda, Florida, Padilla, Corinto, Guachené, Puerto Tejada, Jamundí y Candelaria.