Las autoridades dieron un golpe contundente a la delincuencia al lograr capturar a alias Picotazo, quien en los últimos meses se encargó de amenazar a ganaderos, comerciantes, campesinos y transportadores del sur del Meta.
Según las primeras indagaciones, Giovanny Calderón, conocido como alias Picotazo, era responsable de amenazar de forma sistemática a sus víctimas con explosivos o por medio de despojo violento si no accedían a pagar fuertes sumas de dinero.
De acuerdo con las autoridades, Calderón es señalado de pertenecer al frente Iván Merchán, una de las estructuras que hace parte de las disidencias de las Farc.
No obstante, su actuar delictivo llegó a su fin. Gracias a una serie de pesquisas, fue capturado alias Picotazo, por el Gaula de la Policía Nacional, en una operación desarrollada en el municipio de Granada, departamento del Meta.
Un fiscal perteneciente a Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales lo señaló como uno de los principales responsables de acciones delincuenciales y de ser parte de una red de extorsionistas en el Meta.
Según el material recopilado, el capturado habría utilizado operaciones de intimidación para presionar el pago de extorsiones a diferentes habitantes de Puerto Lleras y Fuente de Oro. Además, las víctimas eran obligadas a pagar “vacunas” bajo la amenaza de ser atacados con explosivos.
Durante el procedimiento de captura, las autoridades encontraron material de intendencia como municiones de diferente calibre, así como una granada de fragmentación. También, hallaron tres teléfonos móviles, cinco tarjetas SIM y una agenda, en cuyo interior estaban los nombres de las personas extorsionadas.
La Fiscalía General de la Nación le imputó los delitos de concierto para delinquir con fines extorsivos, fabricación, tráfico y porte de armas de uso privativo de las Fuerzas Armadas. Pese a todas las pruebas recopiladas por el ente acusador, el implicado no aceptó los cargos.