Este hecho ocurrió en un asadero de pollos, en horas de la tarde, cuando los trabajadores atendían a sus clientes. Era un día de trabajo normal cuando, de forma intempestiva, ingresaron tres hombres.
El primero vestía chaqueta negra y pantalones, así como una gorra para ocultar su rostro. El segundo individuo, que vestía un saco color azul, entró al establecimiento minutos después, amenazando al personal con arma de fuego.
Acto seguido, ingresó el tercer hombre, también armado, y se dirigió a la parte trasera del local comercial. Uno de ellos le apuntó a una de las trabajadoras en la parte baja de la espalda, mientras que los otros dos se dedicaron a hurtar las pertenencias de los asistentes y el dinero de la caja registradora.
Cuando todo parecía indicar que estos hombres se saldrían con la suya, llegó la Policía del cuadrante y, al verse acorralados, los delincuentes intentaron escapar por la parte de atrás del local.
Aunque los individuos lograron escapar, las autoridades frustraron el robo. No obstante, uno de los delincuentes alcanzó a herir a uno de los empleados que los enfrentó.
La rápida acción de la Policía permitió capturar a uno de los asaltantes e incautar la motocicleta donde se transportaba, así como el arma de fuego, y la recuperación del dinero hurtado: 600 mil pesos aproximadamente.
Según investigaciones adelantadas por las autoridades, el hombre arrestado tiene antecedentes por fabricación, porte y tráfico de estupefacientes. También tiene reseñas por amenazas o intimidación a personas con arma de fuego y hurto. Debido a la gravedad del delito, el hombre fue enviado a un centro carcelario.