En un revés contundente para el Gobierno de Gustavo Petro, el Congreso de la República hundió en la mañana de este martes la reforma tributaria que buscaba cerrar el déficit del Presupuesto General de la Nación. Pese a semanas de debates, ajustes de última hora y promesas del ministro de Hacienda, Germán Ávila, las comisiones económicas conjuntas del Senado y la Cámara de Representantes negaron el proyecto.
Aunque las comisiones económicas de la Cámara venían rompiendo el quórum de las sesiones para aplazar los debates, y el Gobierno utilizó ese tiempo para buscar los votos que le faltaban, finalmente la iniciativa se desplomó este martes. Ni siquiera la advertencia del presidente Gustavo Petro sobre la posibilidad de decretar una emergencia económica, una señal que la oposición calificó como una amenaza, logró mover las posiciones ya tomadas.
“Esta es la tercera sesión de debate y vi dos sesiones en las que rompieron el quórum, los cercanos al Gobierno. Hubo debate y no nos iban a cambiar el voto, esta reforma golpeaba a las clases bajas y medias. Se nos viene amenazando con una emergencia económica”, afirmó el senador conservador Efraín Cepeda, uno de los voceros más críticos de la propuesta.
La reforma pretendía levantar 16,3 billones de pesos para cubrir el faltante fiscal de 2026, pero la falta de respaldo político terminó por sellar su hundimiento. Con esta decisión, el país queda frente a un panorama incierto: el hueco fiscal sigue abierto y el Gobierno deberá buscar alternativas urgentes para garantizar la estabilidad presupuestal del próximo año, mientras enfrenta un Congreso cada vez más fragmentado y resistente.












