El municipio de Riosucio, en el Chocó, fue escenario de una tragedia: el fallecimiento de un pequeño por falta de una intervención estructural en la zona.
De acuerdo con las autoridades, el hecho se presentó el lunes 17 de noviembre. Producto de las fuertes lluvias, el río Atrato se desbordó, inundando calles y sectores residenciales, dejando a muchas familias entre el agua.
En este escenario, un pequeñito de un año de edad perteneciente a la comunidad Emberá perdió la vida al caer de forma accidental desde el segundo piso de una vivienda, donde se encontraba, hacia la calle, la cual estaba totalmente inundada.
Según el cuerpo de socorro que atendió la emergencia, el niño murió por inmersión, por lo que no se pudo hacer nada para salvar su vida, pues cuando logró ser rescatado ya no tenía signos vitales.
Jair García, coordinador de Gestión del Riesgo de Riosucio, confirmó la trágica noticia y expresó su preocupación por la falta de mantenimiento de las calles y la canalización del río.
“Lamentablemente, hoy tenemos que informar que uno de nuestros niños pierde la vida debido a que cayó de un segundo piso, pero por encontrarse nuestras calles bajo el agua, perdió la vida. La alcaldía municipal ha venido adelantando charlas de prevención por inmersión, pero sabemos que requerimos intervenciones que sean definitivas para nuestro municipio, el relleno, la canalización de las bocas y el mismo río Atrato”, explicó el coordinador.
La comunidad, al conocer la tragedia, hizo un llamado urgente al gobierno local para implementar las obras faltantes. Aunque la alcaldía manifestó la ejecución de varias jornadas de prevención y capacitación para prevenir accidentes que ocurren en estas situaciones, reconoce que hacen falta acciones más contundentes.
Los habitantes insisten en que, si bien estas acciones son necesarias, no son lo suficientemente efectivas y no sustituyen las labores de mitigación del río que requiere el municipio de Riosucio para que estos accidentes no se repitan.












