En un importante golpe a las disidencias de las FARC lideradas por alias Iván Mordisco, las autoridades colombianas capturaron a tres integrantes de la estructura Armando Ríos en el departamento de Guaviare. La operación, desarrollada tras siete meses de investigación, permitió la detención de dos hombres y una mujer implicados en múltiples delitos contra la población civil y la fuerza pública.
El principal capturado, identificado como alias ‘Miller’ o ‘Pirata’, es señalado como el autor intelectual y ejecutor de la masacre de ocho líderes religiosos ocurrida en el municipio de Calamar, Guaviare. De acuerdo con el coronel Gonzalo Blanco, comandante del departamento de Policía, “alias Miller se encargaba de coordinar homicidios selectivos en toda la jurisdicción de Calamar y es el responsable de la muerte de ocho personas provenientes del departamento de Arauca, en zona rural de este municipio”.
Detalles de la operación y otros capturados
Junto a alias Miller fueron capturados alias ‘La Crespa’ y alias ‘Yuca’, quienes estarían involucrados en actividades de extorsión, ataques con explosivos y acciones contra la fuerza pública. Según las autoridades, estos individuos habrían participado en el reciente atentado contra la vivienda del alcalde de Calamar.
#EsNoticia | Tres presuntos integrantes de la Estructura Primera Armando Ríos, del Bloque Manuel Marulanda Vélez, son capturados en Calamar, Guaviare, durante una operación desarrollada por @COL_EJERCITO, @FuerzaAereaCol, @PoliciaColombia y @FiscaliaCol.#ContundenciaOperacional pic.twitter.com/Ej5bH6wixN
— Fuerza de Tarea Omega (@ftc_omega) October 27, 2025
El coronel Blanco señaló que los tres capturados deberán responder ante la justicia por los delitos de concierto para delinquir, desaparición forzada, homicidio agravado y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego.
De manera adicional, el director de Fiscalía contra el Crimen Organizado, Andrés Escobar, reveló que una de las detenidas era secretaria de la Personería Municipal de Calamar, quien aprovechaba su cargo para filtrar información a la estructura criminal.
“Tenía información privilegiada sobre operaciones de la fuerza pública y la compartía con el grupo armado, permitiéndoles anticiparse a los movimientos militares”, aseguró Escobar.
La masacre de los ocho líderes religiosos
Los hechos ocurrieron en abril de este año. Las víctimas, seis hombres y dos mujeres, pertenecientes a dos familias desplazadas desde Arauca, fueron secuestradas y ejecutadas por integrantes de las disidencias de las FARC. Los captores las acusaron falsamente de colaborar con el ELN, las obligaron a cavar sus propias fosas y luego las asesinaron en un predio rural abandonado.
Solo semanas después, gracias a la captura de uno de los implicados, las autoridades pudieron ubicar los cuerpos y reconstruir el crimen. De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, la orden habría provenido del entorno más cercano de alias Iván Mordisco, cabecilla de las disidencias en la región.













