La violencia de género vuelve a golpear con fuerza a Barranquilla. En la mañana de este lunes 6 de octubre, una mujer identificada como Kelly Johanna De Arco Hurtado, de 42 años, fue asesinada por su expareja sentimental frente al Conjunto Residencial Metro Centro, ubicado en el barrio Ciudadela 20 de Julio, al sur de la ciudad. Según versiones de testigos y reportes policiales, la víctima fue atacada con arma de fuego en la cabeza cuando regresaba a su vivienda, sin oportunidad de defensa.
El presunto agresor tenía antecedentes judiciales y vínculos criminales
El responsable del crimen fue identificado como Eduar Alfonso Castro Daza, alias “El Negro” o “Máquina”, quien habría estado esperando a la víctima en la entrada del conjunto residencial. Tras una discusión breve, le disparó a quemarropa y huyó del lugar.
Pocos minutos después, Castro Daza se presentó voluntariamente en la estación de Policía del barrio El Bosque, donde entregó el arma utilizada en el ataque. El hombre fue puesto a disposición de la Fiscalía por porte ilegal de armas, y las autoridades avanzan en el proceso para imputarle el delito de feminicidio agravado.
De acuerdo con la Policía Metropolitana, el agresor presenta tres anotaciones judiciales activas: una por homicidio, otra por porte ilegal de armas y una tercera por lesiones personales. Además, familiares de la víctima afirmaron que Castro Daza tendría vínculos con el grupo delincuencial “Los Costeños”, lo que agrava el contexto de violencia y riesgo en el que vivía la mujer.
Una relación marcada por la violencia
La investigación preliminar señala que Kelly Johanna y su agresor convivieron durante dos años y habían terminado su relación apenas un mes antes del crimen. Los familiares de la víctima aseguraron que el pasado 4 de octubre el hombre ya la había agredido físicamente, aunque el hecho no fue denunciado ante las autoridades.
Vecinos del conjunto relataron que la víctima había manifestado miedo por las amenazas recibidas, pero no contaba con medidas de protección.
Segundo feminicidio en una semana en Barranquilla
El asesinato de De Arco Hurtado se suma al de Yolanda Estefany Arias Santos, una joven de 24 años asesinada por su pareja sentimental en el barrio La Manga. En ese caso, el agresor, identificado como Jairo Samuel Páez Muñoz, fue capturado tras ser hallado en las playas de Salgar, Puerto Colombia, donde intentó suicidarse luego de confesar el crimen en una carta.
Estos dos feminicidios ocurridos con solo siete días de diferencia han generado indignación social y preocupación entre las autoridades locales por el aumento de casos de violencia contra la mujer.
Aumento preocupante de feminicidios en el Atlántico
De acuerdo con cifras de organizaciones sociales y observatorios de género, durante 2025 se han registrado 42 muertes violentas de mujeres en el departamento del Atlántico, de las cuales entre 7 y 8 han sido tipificadas como feminicidios. Los municipios de Barranquilla, Soledad y Malambo concentran la mayoría de los casos reportados.
La Procuraduría General de la Nación convocó nuevas mesas de seguimiento junto a las autoridades locales y organismos de justicia, con el fin de fortalecer las medidas de prevención y respuesta frente a esta problemática.
“Necesitamos que el sistema judicial actúe con celeridad. Las mujeres están siendo asesinadas por sus parejas o exparejas, incluso después de denunciar”, alertó una vocera de la Mesa Intersectorial de Mujeres del Atlántico.












