El joven italiano Carlos Acutis, de 15 años, que murió en el 2006 por causa de una leucemia y que fue conocido como el ciberapóstol por usar sus redes sociales para hablar de Dios, fue canonizado por el papa León XIV en el Vaticano, convirtiéndose en el primer milenial santo.
Este anuncio se hizo en la misa de domingo, celebrada en la Plaza de San Pedro, en compañía de miles de fieles, quienes esperaban ser partícipes de este histórico momento, en el que León XVI pronunció las palabras en latín que oficializaron la canonización de Carlos Acurtis.
En la misma ceremonia solemne también se canonizó a Pier Giorgio Frassati (1901-1925), un muchacho de familia italiana, quien también fue ejemplo de fe y caridad hacia los más necesitados.
Estos dos jóvenes italianos ahora hacen parte del ejemplo de santidad y devoción a Dios, decisión que fue recibida entre aplausos y oraciones en la Plaza de San Pedro.
¿Quién era Carlo Acurti, ahora santo?
Carlo Acurti era un muchacho italiano que nació en Gran Bretaña el 3 de mayo de 1991 y que falleció a la edad de 15 años, el 12 de octubre de 2006, en Monza, norte de Italia, producto de un cáncer.
Acurti era un apasionado de la ingeniería y la programación de computadores, por lo que creó sitios web para difundir el mensaje de fe y amor de Dios.
Su fe influenció a una generación joven de católicos que lo veían como un ejemplo a seguir. Acurtis, además de generar páginas web de carácter religioso, también documentó milagros eucarísticos.
Luego de su fallecimiento, fue declarado venerable en el 2018 y en el año 2020 se le adjudicó su primer milagro, que fue reconocido por el Vaticano y que le permitió seguir su camino por la beatificación.
Para seguir con el proceso de ser declarado santo, una familia de un niño brasileño aseguró que su hijo tenía problemas digestivos y de páncreas y se salvó sin recurrir a una cirugía, luego que la madre del menor lo encomendara en oración a Carlo Acurti.
El sumo pontífice León XIV manifestó su alegría por esta canonización, así como por la canonización del también joven Pier Frassati, quien ayudó a los pobres y murió de polio en 1920. Esta labor hizo que el pontífice afirmara que es posible alcanzar la santidad.
“Todos ustedes, todos nosotros juntos, estamos llamados a ser santos”, dijo el papa León XIV en la ceremonia.
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