Un año después de conocerse el caso de presunta violencia sexual de una reclusa en la cárcel El Pedregal, en Medellín, autoridades retomaron la investigación para dar con el paradero del implicado.
Producto de las indagaciones y del análisis del material probatorio, un juez de control de garantías dictó orden de aseguramiento en centro penitenciario contra el guarda del Inpec, Diego Stiven Castaño Sánchez, señalado de agredir sexualmente y dejarla en embarazo.
La mujer fue identificada como Andrea Valdés, de 30 años, condenada por homicidio agravado y que permanecía en una celda de tratamiento especial donde habrían ocurrido los hechos.
Durante la investigación, el fiscal detectó que la víctima fue amedrentada para que no denunciara los hechos, sino que además se comprobó que le habrían suministrado una sustancia para que abortara.
“Le tomaron la prueba de embarazo donde sale positivo y ella afirma que le dieron una ingesta que le produjo una amenaza de aborto”, anunció un delegado de la fiscalía.
La investigación también señaló que existiría otro presunto implicado, quien habría participado en los abusos. De acuerdo con los informes, el hombre, identificado como Christian Camilo Alvarado Torres, guarda de seguridad, también habría abusado de la mujer.
Cabe destacar que los implicados fueron capturados durante distintas diligencias realizadas por el CTI de la Fiscalía General de la Nación en La Dorada, Caldas, y Puerto Triunfo, Antioquia.
Según el informe Alvarado Torres, también fue imputado por un juez de garantías por los delitos acceso carnal violento agravado y prevaricato por omisión, pero quedó en libertad. No obstante, sigue vinculado al proceso.