El sábado 2 de agosto, las autoridades ubicadas en el Parque Nacional encontraron a varios menores de la comunidad emberá bajo efectos del alcohol. De acuerdo con las investigaciones, el hecho ocurrió en medio de una fiesta que realizaban los indígenas, quienes están ubicados en el centro de Bogotá.
“A pesar de los esfuerzos de la administración distrital, durante las últimas horas, los equipos de la Alcaldía Mayor identificaron a niños y niñas sin acompañamiento adulto, transitando por zonas de alto riesgo, consumiendo residuos de botellas de alcohol y expuestos a dinámicas que comprometen gravemente su integridad física y emocional”, se lee en un comunicado de la Alcaldía Mayor.
Las autoridades denunciaron que la comunidad emberá se negó a permitir el traslado de los niños a un espacio seguro. Ante la negativa, funcionarios del distrito se vieron obligados a atender a los menores con mayor estado de alicoramiento al interior del parque.
A esta situación se suma otra denuncia y fue el bloqueo que varios indígenas hicieron a la carrera séptima en Bogotá haciendo uso de las vallas que son utilizadas, de manera temporal, en las inmediaciones del Parque Nacional. Producto de este cierre un ciudadano que se movilizaba en moto se estrelló y falleció en el lugar.
Producto de esta denuncia, desde la administración distrital se desplegó un equipo técnico con el fin de activar rutas de protección para los menores. Así mismo, exhortó a la responsabilidad que tiene la comunidad en la protección de la niñez.
“Se dispuso una mayor presencia institucional y el despliegue de sus equipos técnicos para atender la situación (…). Bogotá lamenta este hecho e insiste en que no hay una jurisdicción indígena en el Parque Nacional y hay un deber de corresponsabilidad en el cumplimiento del artículo 44 constitucional que busca mayor protección a niñas, niños y adolescentes”, finaliza el comunicado.