Después de algunas diferencias recientes entre los gobiernos de Estados y Colombia, por el fallo condenatorio, en primera instancia, contra el expresidente Álvaro Uribe, se liman asperezas en Casa de Nariño.
El presidente Gustavo Petro recibió al encargado de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Colombia, John McNamara, cuando hay un tema mayor en agenda: el arancel adicional del 10% que Trump impuso a Colombia, decisión que, hasta el momento, se mantiene.
Anticipándose a cualquier suspicacia, el presidente Gustavo Petro publicó la noticia del encuentro, acompañada de una frase: “En una agradable y larga conversación”, escribió.
Y es que esta semana el mandatario colombiano había llamado a Estados Unidos a no intervenir en las decisiones de la justicia de Colombia, luego de que el propio secretario de Estado, Marco Rubio, escribiera un trino cuestionando la condena a Uribe.
Aunque se temía que esta decisión generara una andanada arancelaria de Estados Unidos contra Colombia, cómo sucedió en Brasil, se ha confirmado que se mantendrá el ya anunciado del 10%. Frente a ello, el Gobierno colombiano está buscando negociar.
“Continúan los acercamientos técnicos entre ambos países orientados a mantener las relaciones comerciales de manera armónica y constructiva. Como Gobierno, estaremos atentos a cualquier pronunciamiento adicional que surja de las autoridades estadounidenses”, señaló la ministra de Comercio, Diana Morales.