La Fiscalía General de la Nación imputó cargos a David Acosta Díaz por su presunta participación en el homicidio del empresario mexicano Horacio Pérez Ledezma, asesinado el 30 de junio de 2024 en un restaurante del exclusivo sector de El Poblado, en Medellín.
Según el ente acusador, Acosta habría sido pieza clave en la planificación del crimen junto a Elder José Arteaga, conocido como alias ‘El Costeño’ o ‘Chipi’, quien también está implicado en el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay como el cerebro del ataque.
Las investigaciones apuntan a que ambos sujetos se desplazaron desde Bogotá hasta Medellín para ultimar detalles del atentado. La víctima, un empresario mexicano de 54 años dedicado al negocio de la tecnología, estaba en la ciudad celebrando una despedida de soltero con amigos cuando fue atacado a quemarropa recibiendo ocho disparos mientras almorzaba.
Actualmente, David Acosta se encuentra recluido en la cárcel de Acacías (Meta) y fue imputado por los delitos de homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego.
Un patrón criminal que se repite
La Fiscalía reveló que este caso guarda preocupantes similitudes con el atentado contra Miguel Uribe: ambos hechos fueron cuidadosamente planeados, se coordinaron desde Bogotá y habrían contado con el apoyo de una estructura criminal encargada de reclutar menores de edad, campaneros, transportadores y sicarios.
Alias ‘El Costeño’, señalado como el cerebro de estas operaciones, ha sido uno de los principales focos de las autoridades por su presunto rol como determinador en varios crímenes de alto perfil.
Mientras continúan las investigaciones, el caso del empresario mexicano refuerza las alertas sobre redes criminales que operan con precisión y complicidad en diferentes ciudades del país.











