Un cruel ajuste de cuentas, esa es la hipótesis que manejan las autoridades con respecto al hallazgo del cuerpo sin vida de Marcos Aguilar, un joven de 16 años, que según la comunidad era un muchacho juicioso, reservado y sin antecedentes ni problemas judiciales.
Este caso se presentó en Santa Ana, sector de la Cruz, en Magdalena. Allí fue encontrado Marcos Aguilar, tendido en el suelo, con varios impactos de bala en la cabeza. Lo que llamó la atención de los investigadores fue el mensaje que hallaron junto al cadáver y que decía: “por sapo de la ley”.
El CTI notó que no había señales de robo ni de forcejeo, solo la nota que tiene en alerta a la comunidad.
El apellido, una condena a muerte
De acuerdo con las indagaciones, Marcos Aguilar, era hijo de alias el ‘Guaya’, quien está en prisión por los delitos de extorsión, porte ilegal de armas y vínculos con estructuras criminales presentes en la región. Al parecer, el ‘Guaya’ dio información sensible a las autoridades y por eso, al parecer, lo “castigaron”, asesinando a su hijo, afirmó una fuente judicial.
Ahora la investigación se centra en determinar de qué manera alias el ‘Guaya’ facilitó datos a la Policía y si fue eso lo que provocó el ajuste de cuentas por parte de otros miembros de una organización rival.
A raíz de esta muerte del joven, la comunidad de Santa Ana tiene miedo. Muchos no se atreven a salir de sus casas.
Los habitantes del sector saben que ese mensaje no solo era dirigido al padre del menor, sino a todo aquel que se atreva a denunciar a los criminales. Por eso, hacen un llamado para que las autoridades realicen patrullajes, cuiden a la comunidad y capturen a los delincuentes.