La semana comienza con una imagen impresionante y simbólica de la Plaza de Bolívar de Bogotá. El corazón de la ciudad está cubierto por un enorme tapete de botellas plásticas, que impiden incluso caminar por este emblemático lugar.
Se trata de una protesta de miembros de la Asociación Nacional de Recicladores que una reunión con el Gobierno Nacional, con el fin de mejorar las condiciones para los trabajadores de este sector, ya que aseguran que rayan en la precariedad.
Estás personas exigen reconocimiento a la labor que realizan y ser considerados actores claves en la economía circular y la justicia ambiental.
La Plaza de Bolívar está cubierta con nueve toneladas de basura plástica, recogida en menos de una semana en la ciudad. Con ello, se busca visibilizar la importancia del trabajo que realizan los recicladores en el cuidado del ambiente y en mantener limpias las calles del país.
“Queremos mostrarle a la ciudadanía lo que pasaría si todo este material se fuera al relleno Doña Juana”, señaló Nohora Padilla, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Recicladores de Colombia.
Agregó que los precios del material han bajado hasta en un 30%, lo que ha afectado considerablemente el desarrollo de su actividad. Y sostuvo que las condiciones laborales de los recicladores son precarias.