Un desgarrador hecho se conoció este miércoles 4 de junio, el cual involucra la falta de atención oportuna. La historia fue revelada por Noticias RCN. Según este medio de comunicación, Juan José, un bebé de dos meses que nació prematuro, requería con urgencia los servicio de una unidad de cuidados intensivos (UCI), en Buenaventura, Valle del Cauca.
Pese a que Juan José tenía problemas respiratorios, se aferró a la vida y, contra todo pronóstico, permaneció estable, pero según el parte médico, debía ser trasladado a un centro médico de mayor complejidad.
Por ello, sus padres buscaron que la EPS Coosalud lo remitiera a una UCI neonatal para salvar su vida. Sin embargo, el mayor temor de Sharon, su mamá, se hizo realidad, pues denuncia que la entidad no le otorgó el traslado.
“Tengo mucho miedo a que a mi hijo le pase algo. Que un día yo lo vaya a visitar y me digan que mi hijo se me murió”, sostuvo la madre del bebé.
Frente a este caso, la EPS Coosalud se pronunció y argumentó que se hizo todo el proceso para el traslado del pequeño a la UCI neonatal y, de esta manera, pudiera recibir la interconsulta por infectología, pero presuntamente no fue posible.
La Secretaría de Salud del Valle aseguró que conocía del caso y que sí se consiguió la cama que Juan José requería, pero el traslado no se efectúo por la ausencia de una ambulancia.
El fallecimiento de Juan José es, según las autoridades de salud, consecuencia del cierre de varias unidades de atención pediátrica y servicios neonatales en varias clínicas del Valle del Cauca.
“Es absolutamente lamentable que nosotros no tengamos unidades de neonatos donde atender estos casos de forma oportuna”, aseveró María Cristina Lesmes, secretaria de Salud del departamento.
Y frente al caso de la EPS, afirmó la funcionaria que la alta demanda de estas unidades pediátricas no permitió la remisión.
“A pesar de los esfuerzos del equipo médico y la priorización de la gestión por parte de Coosalud EPS en la ubicación de una IPS de UCI neonatal para la interconsulta de infectología, la consecución de la remisión se vio afectada por la alta demanda y complejidad de los casos a nivel general”, puntualizó Lesmes.
Cabe destacar que la deuda de las EPS en el Valle del Cauca supera los 3,5 billones de pesos, lo que ha provocado el cierre de varias clínicas del departamento y la cancelación de servicios neonatales.