Como ya es usual, Gobierno y Congreso volvieron a enfrentarse en un nuevo round por la consulta popular. Esta vez, el presidente del Senado, Efraín Cepeda, se fue lanza en ristre contra la aseveración del ministro del Interior Armando Benedetti, quien sostuvo que, de no aprobarse la consulta en el Legislativo, antes del 1 de junio, la convocarán por decreto.
“Esta acción representa un grave atentado contra el Estado de Derecho y la separación de poderes, al ignorar una determinación del poder legislativo y usurpar funciones judiciales reservadas exclusivamente a la rama judicial”, dijo Cepeda.
Así mismo, señaló que el Congreso se mantendrá firme en la defensa de las instituciones. “No permitiremos que se vulnere la Constitución ni que se empleen maniobras para desviar millonarios recursos públicos hacia intereses políticos y campañas electorales. El Senado, en ejercicio de sus facultades legales, rechazó la consulta cuya aprobación es un requisito indispensable para su viabilidad”, subrayó.
Además, hizo una advertencia clara en caso de llegar a materializarse el escenario que plantea Benedetti. “Si el Presidente emite un decreto inconstitucional, recurriremos de inmediato a las instancias judiciales competentes para salvaguardar la democracia. No toleraremos actitudes autoritarias que pretendan engañar a los colombianos o pasar por encima del Congreso de la República y la Rama Judicial. El desespero no puede justificar el autoritarismo”, enfatizó.
Ni corto ni perezoso, el presidente Gustavo Petro le respondió a través de X: “Solo cumpliré la ley. Por hacer trampas y fraude contra la consulta, sabiendo que había mayoría en la plenaria a favor de ella, e impidiendo la votación de los senadores presentes, levantando la sesión de afán, se le olvidó lo más importante”.
Ya son tres las ocasiones en que el Gobierno ha radicado la consulta popular en el Congreso, sin mucho éxito hasta ahora. El Ejecutivo insiste en que se reabra la votación del primer documento, pero el Legislativo ya dijo no a esa posibilidad.