Dieciocho días duró secuestrado el pequeño Lyan José Hortúa, a quien sacaron abruptamente de su casa en Jamundí, Valle del Cauca. Finalmente, después de que el Gobierno se mostrara ajeno a lo sucedido, el menor de edad fue liberado este 21 de mayo, para alegría de su familia y de todo un país.
Sin embargo, empiezan a conocerse algunos detalles de su liberación. En entrevista con La FM, de RCN radio, el tío del menor, Sebastián Bonilla, sostuvo que tuvieron que pagar la extorsión que cobraban los criminales.
“Nosotros al ver la poca eficiencia de la autoridad y con toda la zozobra de que le pudiera pasar algo pagamos el rescate. El valor me lo reservo por seguridad del niño y de nosotros, pero nos vimos en la obligación de pagar un rescate, expresó el familiar del pequeño y reveló además que quedaron endeudados.
Incluso, sostuvo que un funcionario le recomendó hacer el pago. “Me reservo cuáles fueron las personas del Estado que nos apoyaron, pero nos dieron la razón para pagar el rescate”, afirmó Bonilla en La FM.
Y contó pormenores de esta situación. “Muchas personas del Estado nos decían que había que negociar con ellos y eso fue lo que hicimos, porque no nos ofrecieron más soluciones que esa. Sentimos un total abandono del gobierno de Gustavo Petro”, relató al medio de comunicación radial.
Al parecer, el grupo que tenía secuestrado a Lyan eran las disidencias de las Farc, que estaban exigiendo una gruesa suma por la liberación del niño.
El primer parte médico indica que Lyan se encuentra en buen estado de salud, aunque me siguen realizando algunos chequeos para tener certeza de que su salud es estable.