Tras el cierre de la Capilla Sixtina, los cardenales realizaron este miércoles la primera votación, la cual arrojó humo negro. El cónclave seguirá este jueves, y los días que sean necesarios, hasta que haya nuevo pontífice.
A partir del segundo día, los cardenales podrán votar hasta cuatro veces, dos por la mañana y dos por la tarde, actividad que será regulada por la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis, promulgada por el santo padre Juan Pablo II, en 1996.
Los votos serán leídos en voz alta por los llamados escrutadores. Luego, todas las papeletas se juntan y se queman para anunciarle al mundo la decisión de los cardenales. Ahora bien, si el cónclave completa su tercera jornada sin una decisión, los cardenales pueden hacer una pausa y realizar un día de oración.
Para continuar con el aislamiento y la promesa de mantener la votación en secreto, los purpurados, finalizada la jornada de votación, se trasladan en procesión desde la Capilla Sixtina hasta la casa Santa Marta. Este espacio está destinado para orar, cenar y descansar, sin embargo, permanecen incomunicados, es decir, sin teléfonos móviles o internet, rompiendo todo contacto con el exterior.
¿Cuántos votos se requieren para elegir al próximo papa?
Según expertos, se requieren tres cuartas partes de los votos para la elección de nuevo pontífice, es decir, en esta ocasión 89 votos de 133 cardenales. Si se alcanza esta cifra, significará que hay una decisión unánime, por tanto, la fumata será de color blanco y se conocerá al nuevo pontífice.
Expertos creen que este jueves o viernes, o a más tardar el sábado, el mundo sabrá quién es el sucesor del papa Francisco.