Todo está dispuesto para que inicie el cónclave, uno de los acontecimientos más importantes de la Iglesia católica. En cuestión de horas, el mundo será testigo del simbólico momento en que los 133 cardenales, que tendrán la misión de elegir al nuevo papa, se encierren en la emblemática Capilla Sixtina.
De ese grupo de purpurados de 70 países, uno saldrá papa. Y aunque muchos nombres suenan y resuenan, la historia ha demostrado que no siempre se elige al que más figuración tiene.
A las 10:00 de la mañana de este miércoles, 7 de mayo (hora Roma), se celebrará la misa por la elección del Pontífice. Serán las 3:00 de la madrugada en Colombia. El acto litúrgico se transmitirá por el canal católico EWTN.
Más tarde, a las 4:30 de la tarde, hora local, y siendo las 9:30 de la mañana en Colombia, se dará inicio a la procesión de los cardenales, desde la Capilla Paulina del Palacio Apostólico hacia la Capilla Sixtina. Allí elevarán una oración al Espíritu Santo, y luego, el maestro de ceremonias pronunciará el “Extra omnes”, que quiere decir “todos fuera”.
A partir de ese momento, sólo los purpurados quedarán de puertas para adentro en la capilla pintada por Miguel Ángel, un derroche impresionante de arte y de religiosidad. Este lugar fue escogido para realizar el cónclave, como símbolo de que Dios es testigo de esa elección y a Él rendirán cuentas.
Se prevé que la primera votación se dé después de las 6:30 de la tarde (11:30 a.m de Colombia), cuando se verá salir de la chimenea que reposa en el techo de la capilla, la primera fumata. Cuando el humo sea blanco, se anunciará al nuevo papa.
El Vaticano ha hecho un despliegue informativo oportuno y masivo sobre los preparativos para el cónclave, en medio de una era de interconexión, que cambiará la visión de este magno evento y que ha permitido a los fieles enterarse de detalles antes desconocidos o inaccesibles.
Ya se conocen incluso las sotanas, de distintas tallas, que aguardan en la Sala de Lágrimas, donde el nuevo papa se revestirá de blanco, por primera vez en su pontificado.
La Iglesia católica parece tener calculado hasta el mínimo detalle, con una organización impecable, que muestra un respeto aún vigente por la tradición y los ritos.