A dos semanas de haberse levantado el racionamiento de agua en Bogotá, que duró un año casi eterno para los capitalinos, el alcalde de la ciudad, Carlos Fernando Galán, dio un parte de tranquilidad.
“Vamos por buen camino. Chingaza está en más de 45% y está 23 millones de m3 por encima de la curva guía, es decir del nivel normal para esta época del año. Además, el consumo promedio de la ciudad sigue por debajo del que teníamos antes del racionamiento”, señaló.
Así mismo, el embalse de San Rafael alcanza un 59,94% y el de Chuza, 40,85%, de acuerdo con datos de la Corporación Autónoma de Cundinamarca (CAR).
El alcalde invitó a la ciudadanía a seguir ahorrando agua y lanzó algunas pullas a quienes afirmaban que para esta época la situación iba a ser crítica.
“Tenemos que seguir trabajando juntos. Bogotá está viva, no crean en teorías ‘chimbas’ de quienes cada día trinan sobre un nuevo apocalipsis”, dijo.
Hay que señalar que Bogotá y Colombia entera se encuentra en la primera temporada de lluvias del año, lo que ha tenido un impacto positivo en el nivel de los embalses.
